CHRISTCHURCH
- GREYMOUTH
Este servicio diario entre las costas este y oeste de la isla Sur de Nueva Zelanda, a través de los espectaculares Alpes del Sur, ofrece a los viajeros un paisaje magnífico imposible de contemplar por carretera, además de una selva tropical, montañas nevadas y una suave campiña verde.
La isla Sur
de Nueva Zelanda cuenta con algunos de los paisajes montañosos más espectaculares
y accesibles del mundo. Situada en el gran océano del Sur, su clima está
influido por los vientos húmedos y fríos que soplan del oeste. Los Alpes del
Sur, que forman una barrera contra estos vientos, llegan hasta los 3.000 metros
de altura y recorren la isla en toda su longitud. Por consiguiente, el lado
oeste de la isla sufre grandes precipitaciones y tiene una temperatura moderada,
lo cual origina una exuberante selva subtropical. En un claro contraste, la
costa este de la isla es relativamente seca, debido al efecto föhn (un viento
seco y caliente que baja de las montañas). La mayor parte de las tierras bajas
del este está ocupada por las llanuras de Canterbury.
Alrededor de
1860, el descubrimiento de oro en la costa oeste llevó a la construcción de una
carretera que partía de Christchurch. Más tarde, la necesidad de transportar
madera y carbón hizo necesario un ferrocarril, un medio eficiente para llevar
los materiales; la construcción empezó en 1867. El problema de atravesar los
Alpes del Sur se solventó con un túnel excavado a partir del Paso Arthur (737
metros sobre el nivel del mar), con una pendiente de 30,30 milésimas por metro
y una longitud de 8,6 kilómetros. La línea no se terminó hasta 1923, debido a
los altos costes y a las dificultades de construcción.
La partida de Christchurch
La
impresionante estación ferroviaria de Christchurch, dominada por una torre con
reloj, ya no muestra la actividad frenética de los otros tiempos. Una puerta
pequeña en el extremo este es el acceso al despacho de venta de billetes y al
vestíbulo. Durante los años 90, el resto del edificio se convirtió en
elegantes oficinas.
La
popularidad de esta excursión queda reflejada en la cantidad de gente que hay
congregada en el andén. En esta fría mañana de primavera, la mayoría es
turistas extranjeros y unos cuantos viajeros que se encaminan a sus puestos de
trabajo. El color distintivo del tren es el azul eléctrico, con una banda
longitudinal roja y blanca por debajo de las ventanas panorámicas (1x2 m.) La
locomotora diésel eléctrica, de color azul, con los testeros y el contorno
amarillos, está siendo remolcada. El agente del tren permanece ante la puerta y
va designando los asientos, los cuales están tapizados con lana de Canterbury y
dispuestos, respaldo contra respaldo, en grupos de cuatro, con mesas para
comer en medio. Por el interfono se anuncia la inmediata partida del
Transalpino y con un toque de bocina de la locomotora los siete coches del tren
(seis de viajeros y el furgón de cola) se ponen en marcha.
Al igual que
otras muchas ciudades, Christchurch cuenta con unas zonas industriales y almacenes
que bordean la línea férrea. Al dejar la ciudad, el tren aumenta su velocidad
y se une a la línea principal de enlace con la isla del Sur. A las llanuras de
Canterbury les sucede Cityscape. En Rolleston, sube un par de excursionistas
con sus mochilas; luego, el tren deja la línea de enlace y, girando hacia el
oeste, entra en la línea de Midland.
Un
paisaje inglés
A una
velocidad de unos 90 km/h, el tren avanza con rapidez por estas vías rectas y
de pendiente suave, casi imperceptible. El día es claro y el Sol aún no se ha
metido en la niebla baja. El paisaje es llano y verde, con hileras de árboles
de hoja perenne que dividen el terreno en grandes rectángulos. Hay algunas
granjas resguardadas por terrazas de árboles de hoja caduca, robles, olmos y
tilos, cubiertas de la hierba verde de la primavera. A esta zona se la compara
con el paisaje llano del este de Inglaterra.
Tras unos 55
km de recorrido, aproximadamente, la siguiente parada es Darfield, a una
altura de 198 metros. Cuesta creer que, tan sólo hace un par de meses, la nieve
caída causó la pérdida de numerosas ovejas. A medida que el Sol va subiendo,
la niebla desaparece y, de vez en cuando, se vislumbra el pico nevado de una
montaña.
A una hora y
veinte minutos de Christchurch el tren entra en Springfield, que se encuentra a
una altitud de 383 metros. Una parada de diez minutos permite estirar las
piernas. La estación de Springfield, ahora desierta, era antes el cruce de una
línea secundaria y un depósito de locomotoras de vapor. Aquí se enganchaban las
potentes locomotoras 4-8-4 de la Serie Kb o J para arrastrar los trenes en la
pronunciada pendiente del Arthur Pass.
Para entonces
ha subido al tren un tropel de japoneses y el cielo se ha despejado, dejando
ver la primera imagen cercana de los Alpes del Sur. Las estribaciones
montañosas cubiertas de nieve suben a la sierra de Torlesse.
Una vez se ha
dejado atrás Springfield y cruzado el río Kowai, las azafatas y el agente del
tren sirven té Devonshire. “Kowai” es una palabra maori que literalmente
significa “reunirse las aguas” y, enseguida, el Kowai se une al río
WaimaKariri.
Un
paisaje más estimulante
Las colinas y
la altiplanicie se ven sustituidas por una espectacular garganta y una cadena
de colinas nevadas y laderas pedregosas. El tren entra en el primero de los 19
túneles, anuncio de un tramo de vía espectacular. Mientras el viaducto
Patterson Creek va quedando atrás, la subida se acentúa y las dos diésel GM
trabajan más duramente. La gente intenta fotografiar la parte trasera del tren
y la vista bajo la garganta. Cinco túneles más se suceden con rapidez, y se
alcanza a ver el WaimaKariri nevado serpenteando camino a la costa este. El túnel
número 6 empieza el descenso al viaducto de Staircase, que, a 73 metros de
altura, es el más alto de la línea. Este paisaje está reservado solamente a los
que viajan en tren, pues la carretera se aparta del ferrocarril en Springfield
y no vuelve a unirse a él hasta Cass.
Luego viene el río Broken. Durante los cuatro años que duró la construcción del viaducto, ésta fue la estación de cabecera. Los viajeros iban en coche de diligencia a través de la garganta hasta coger un nuevo tren al otro lado. Aquí, según dicen, había una colonia, pero ahora no queda rastro de ella. A medida que el tren va subiendo a las tierras altas de Canterbury, nos encontramos con más túneles, estrechos y sombríos valles, y sauces cubiertos de escarcha y pastizales. Cerca de Craigiebum, un cerro de 622 metros de altura, empieza la bajada de Cass, donde nos volvemos a encontrar con el rio WaimaKariri, a una altitud de 549 metros. Se va abriendo el valle y las colinas peladas bordean las cumbres cubiertas de nieve. Montecillos de hierba, espinos y rosas silvestres forman la vegetación.
El tren avanza con facilidad a lo largo de rectos terraplenes, el rio queda a la izquierda y el paisaje es extraordinario. Una vez pasado Cora Lynn, el tren entra en el Parque Nacional de Arthur's Pass. Tras bordear Klodyke Corner, penetra en el valle del río Bealy, donde se encuentra el término municipal de Arthur's Pass y la estación. Al otro lado del río Bealy, la carretera vuelve a encontrarse con el ferrocarril. Arthur's Pass es un centro turístico para la práctica del esquí, la caza y las excursiones, y donde las residencias de veraneo de la clase acaudalada se cobijan entre los árboles.
Luego viene el río Broken. Durante los cuatro años que duró la construcción del viaducto, ésta fue la estación de cabecera. Los viajeros iban en coche de diligencia a través de la garganta hasta coger un nuevo tren al otro lado. Aquí, según dicen, había una colonia, pero ahora no queda rastro de ella. A medida que el tren va subiendo a las tierras altas de Canterbury, nos encontramos con más túneles, estrechos y sombríos valles, y sauces cubiertos de escarcha y pastizales. Cerca de Craigiebum, un cerro de 622 metros de altura, empieza la bajada de Cass, donde nos volvemos a encontrar con el rio WaimaKariri, a una altitud de 549 metros. Se va abriendo el valle y las colinas peladas bordean las cumbres cubiertas de nieve. Montecillos de hierba, espinos y rosas silvestres forman la vegetación.
El tren avanza con facilidad a lo largo de rectos terraplenes, el rio queda a la izquierda y el paisaje es extraordinario. Una vez pasado Cora Lynn, el tren entra en el Parque Nacional de Arthur's Pass. Tras bordear Klodyke Corner, penetra en el valle del río Bealy, donde se encuentra el término municipal de Arthur's Pass y la estación. Al otro lado del río Bealy, la carretera vuelve a encontrarse con el ferrocarril. Arthur's Pass es un centro turístico para la práctica del esquí, la caza y las excursiones, y donde las residencias de veraneo de la clase acaudalada se cobijan entre los árboles.
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◄ Espectacular vista aérea de la garganta de un río, al norte de las llanuras de Canterbury. Al fondo se ven los picos nevados de la sierra de Torlesse.
━━━━━━━━━━━━━━━Aquí, en los
primeros años del ferrocarril, las locomotoras eléctricas reemplazaban a las de
vapor en los 6,6 km que tiene el túnel de largo, permitiendo que los pasajeros
pudieran tomar un refrigerio durante 20 minutos. Con las diésel modernas este
cambio no es necesario generalmente, aunque los trenes de carbón que se
dirigen al puerto de Lyttelton siguen utilizando tres locomotoras eléctricas
modernas para cruzar el túnel.
La estación
está situada a 737 metros, siendo la más alta del país. Cuando llega el tren,
alrededor de las 10 horas, el agente anuncia una parada de 10 minutos. Algunos
viajeros aprovechan la ocasión para fotografiar la locomotora y el paisaje. Un
tren de carbón muy largo, con vagones tolva de 50 toneladas, pasa retumbando
con tres locomotoras eléctricas de la Serie NZR Ea en cabeza. Enseguida, un
pitido procedente de nuestra locomotora hace que los pasajeros vuelvan
apresuradamente al tren.
Cuesta
abajo hasta Otira
Una vez más
en camino, el tren cruza el río Bealy y penetra en el túnel de Otira, donde la
cuesta abajo conduce al término municipal del mismo nombre. El paisaje cambia
los bosques de haya por los riscos cubiertos de líquenes, junto al cauce
tumultuoso del río Otira.
La estación
de Otira está 4 km por debajo de la cara oeste del túnel, a una altura de 376
metros, marcando el final del único tramo electrificado de la isla del Sur. Otira
es una aldea pequeña, con depósitos de locomotoras y con unas casas para los
trabajadores funcionales pero poco atractivas. Al igual que la de Arthur's
Pass, ésta solía ser una parada para tomar un refrigerio, y la estación, ahora
cerrada, muestra signos de un pasado ilustre. El tren hace una parada para los
viajeros que no son turistas. La cocina del tren vuelve a abrirse y se ofrece
comida caliente a los viajeros.
A
través de ríos y lagos
Fuente: El Mundo de los Trenes - Ediciones del Prado S.A. 1997 - Madrid (España), salvo mención expresa.
El tren
circula ciñéndose, a la derecha, al tumultuoso río TaramaKau, crecido con las
lluvias y, a la izquierda, al exuberante bosque recubierto de musgo. Una vez
más, dejamos atrás las cumbres nevadas y pasamos por unas cuantas vaquerías. Un
puente largo y bajo cruza el río TaramaKau; después, el tren gira a la derecha
a través de un valle poco profundo con el lago Poerua a la izquierda reflejando
las montañas y el cielo azul. Clematis blancas se enredan sobre el dosel que
forma la vegetación originaria de la selva subtropical.
A la orilla del lago más grande y hermoso de la provincia de Westland, el lago Brunner, se encuentra el famoso refugio de pesca Mitchells. Bordeando la orilla norte, el tren se para en Moana, un pequeño centro turístico. A una altura de 91 metros, Moana (palabra que significa “agua”) dispone de una estación ferroviaria privada, un depósito de carga y un jefe de estación que busca esposa, según dijeron por megafonía.
Una vez dejado el lago, el Expreso Transalpino continúa cuesta abajo a través de un valle pantanoso que sigue al sinuoso río Arnold hasta el empalme de Stillwater. Un tren de carbón con dos locomotoras diésel espera en el cruce a que pase el Transalpino. Todas las líneas principales de la isla del Sur son de vía única al pasar por los cruces o apartaderos de las estaciones. A principios del siglo XX, las mercancías y el material se cargaban en estos apartaderos.
A partir de Stillwater, la línea sigue el profundo y fangoso río Grey, pasadas las antiguas minas de carbón. Una vez cruzado el último túnel, el número 19, el tren sigue la carretera principal en el interior de Greymouth. Los días en que Greymouth, la ciudad más importante de la costa oeste de la isla del Sur, era un lugar próspero, primero con minas de oro y luego de carbón, quedan muy lejos, y su población (8.000 personas, aproximadamente) está disminuyendo.
A la orilla del lago más grande y hermoso de la provincia de Westland, el lago Brunner, se encuentra el famoso refugio de pesca Mitchells. Bordeando la orilla norte, el tren se para en Moana, un pequeño centro turístico. A una altura de 91 metros, Moana (palabra que significa “agua”) dispone de una estación ferroviaria privada, un depósito de carga y un jefe de estación que busca esposa, según dijeron por megafonía.
Una vez dejado el lago, el Expreso Transalpino continúa cuesta abajo a través de un valle pantanoso que sigue al sinuoso río Arnold hasta el empalme de Stillwater. Un tren de carbón con dos locomotoras diésel espera en el cruce a que pase el Transalpino. Todas las líneas principales de la isla del Sur son de vía única al pasar por los cruces o apartaderos de las estaciones. A principios del siglo XX, las mercancías y el material se cargaban en estos apartaderos.
A partir de Stillwater, la línea sigue el profundo y fangoso río Grey, pasadas las antiguas minas de carbón. Una vez cruzado el último túnel, el número 19, el tren sigue la carretera principal en el interior de Greymouth. Los días en que Greymouth, la ciudad más importante de la costa oeste de la isla del Sur, era un lugar próspero, primero con minas de oro y luego de carbón, quedan muy lejos, y su población (8.000 personas, aproximadamente) está disminuyendo.
El trazado de la línea de "El Transalpino" (The TranzAlpine) de costa a costa. |
Fotos más actuales de "El Transalpino" (The TranzAlpine)
CC BY-SA 4.0 ©TrainboyMBH licencia internacional Creative Commons Attribution-Share Alike 4.0 - Archivo: El TranzAlpine en dirección este, remolcado por las DXC's 5391 y 5333, llegando a Springfield.jpg-Creado el 21 de diciembre de 2016. |
CC BY-SA 4.0 - ©TrainboyMBH Archivo: TranzAlpine departing
Springfield.jpg - Creado el 24 de enero
de 2016 licencia internacional Creative
Commons Attribution-Share Alike 4.0 - Las locomotoras DFB 7241 y DXC 5270 salen de
Springfield con el TranzAlpine.
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CC BY-SA 4.0 ©Maksym Kozlenko Archivo: Diesel locomotive 4761.jpg-Creación:
7 de junio de 2008-licencia internacional Creative Commons Attribution-Share Alike 4.0 - Las diésel DCPs 4761 y 4801 con el TranzAlpine en
Arthurs Pass.
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